Territorios
Rincón para Emprender
Planificación Estratégica
Durante los últimos diez años los 50 Grupos de Desarrollo Rural de Andalucía, coordinados por la Dirección General de Desarrollo Rural de la Consejería de Agricultura y Pesca, han estado trabajando para conseguir el desarrollo de sus territorios, tanto desde una perspectiva económica como desde la social y ambiental. Este objetivo se ha alcanzado gracias a las contribuciones financieras de los fondos estructurales europeos, con las correspondientes cofinanciaciones del Estado español (procedentes de la Administración general del Estado y de la Comunidad Autónoma).
La actividad de los Grupos se inició con la Iniciativa Comunitaria LEADER, convocada en 1991, y que propició el nacimiento de las nueve primeras entidades que comenzaron a trabajar en Andalucía. Sin embargo, no es hasta 1996 cuando, con el desarrollo de la Iniciativa Comunitaria "LEADER II" y, posteriormente, del Programa Operativo "Desarrollo y Diversificación Económica de Zonas Rurales - PRODER Andalucía", se extiende a casi el 90% del territorio de Andalucía la implantación de los Grupos de Desarrollo Rural y más de 3,5 millones de andaluces del mundo rural se convierten en beneficiarios potenciales de la intervención de los fondos aplicados en estos Programas de Desarrollo Rural.
En este contexto, la Asociación para el Desarrollo de la Zona Rural de la Campiña de Jerez, entidad privada sin ánimo de lucro, se constituyó como tal en noviembre de 1994 para gestionar los citados fondos PRODER-Andalucía con una visión integradora y de participación, cuyo ámbito de actuación comprendía en aquellos comienzos todo el término municipal de Jerez de la Frontera y la zona regable del pantano de Guadalcacín de El Puerto de Sta. María, es decir, el Poblado de Doña Blanca; aunque tenía vocación de trabajo a niveles más amplios como el provincial, regional, nacional e internacional.
Los Grupos de Andalucía, al igual que los demás grupos españoles y europeos, actuaban inicialmente como entidades que, considerándose beneficiarias de los Programas indicados, ejecutaban en sus territorios un proyecto de desarrollo que habían tenido que presentar en la correspondiente convocatoria y que justificaba la asignación de los fondos públicos al Grupo beneficiario. Durante ese periodo no se entendía muy bien si el beneficiario de los fondos era directamente la población rural o si, por el contrario, la población se beneficiaba indirectamente como consecuencia del beneficio de los Grupos de Desarrollo.
Ya durante la ejecución de los Programas indicados, desde 1996 hasta 2000, la Dirección General fue interviniendo con los Grupos para conseguir, progresivamente, un cambio de mentalidad en la comprensión de su rol en la aplicación de fondos públicos a favor de la población y del mundo rural. Poco a poco se consiguió clarificar que los Grupos, en su actividad cotidiana, realizaban una labor de fomento, es decir, que concedían subvenciones a terceros, interviniendo de una forma realmente singular, al estilo de una Administración pública, con la particularidad de que su personalidad jurídica era de naturaleza privada y su capacidad de intervención cercana, directa e innovadora.
Y los procesos participativos de planificación estratégica, como metodología de cogobernanza para compartir y validar con la población de los territorios rurales los planes de actuación para cada uno de los marcos temporales europeos se han afianzado como una herramienta imprescindible que se ha ido perfeccionando con el paso de los años y de la experiencia adquirida.
Así, al comienzo del marco comunitario 2000-2006 se concedió a los 50 Grupos de Desarrollo Rural una subvención idéntica para todos, de 12.000 euros, para que cada uno elaborase en su comarca una Estrategia de Desarrollo sin condiciones homogeneizadoras ni abordarse un planteamiento regional. El resultado fue que cada Grupo elaboró su definición estratégica según sus propias capacidades y su particular forma de entender la metodología de trabajo en la planificación estratégica.
Como consecuencia de ello, los Grupos iniciaron el marco teniendo una Estrategia propia de cada comarca, pero sin que se consiguiera disponer de un planteamiento a escala regional ni, tampoco, provincial. Las calidades de cada definición estratégica resultaron dispares, y los contenidos y propuestas de todas ellas no resultaban comparables ni fácilmente integrables.
Por ello, cuando se inició el nuevo periodo de programación 2007-2013, la Consejería de Agricultura y Pesca, a través de su Dirección General de Desarrollo Rural, decidió intervenir para mejorar la anterior situación. A tal efecto, desde la Dirección General se tomaron las siguientes decisiones:
- Propiciar que en todas las comarcas de Andalucía se realizase un proceso de reflexión sobre su evolución socioeconómica, sobre la situación en que se encontraban al finalizar el Marco anterior, y sobre las necesidades que tendrían cara al futuro.
- Establecer una metodología común regional, que permitiese su extrapolación a escalas provinciales, para la realización de dicho proceso de reflexión y para la elaboración de la estrategia de desarrollo.
Se puede comprobar dicha evolución en la metodología y procesos participativos de nuestro territorio consultando los distintos epígrafes de este bloque de contenidos sobre Planificación Estratégica en el GDR Campiña de Jerez, divididos según programas y marcos comunitarios europeos.